Las restricciones a las exportaciones de carne no colaboran a la transparencia del mercado
Así lo aseguró el consorcio ABC. Considera que se debe convocar a toda la cadena al diálogo. CICCRA cuestionó el anuncio oficial y apoya el cese de comercialización de hacienda.
BUENOS AIRES (NAP) A las puertas de un nuevo cese de comercialización por ocho días dispuesto por la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, tras conocerse la suspensión de las exportaciones de carne por 30 días, el Consorcio ABC, consideró que las restricciones comunicadas no ayudan a colaborar para mejorar la transparencia del negocio de carnes.
El principal exportador de carnes vacunas de Argentina, asegura que acompaña los objetivos de “las medidas destinadas a ordenar el sector, restringir prácticas especulativas, mejorar la trazabilidad de las exportaciones y evitar la evasión fiscal”.
El consorcio aclara, sin embargo, que el anuncio de “la decisión de limitar las exportaciones de carnes vacunas por el término de 30 días, como parte de esas medidas, “las restricciones comunicadas en nada colaborarán para su alcance”.
La entidad y las empresas asociadas colaboran constantemente para buscar alternativas para abastecer el mercado local y proponer las medidas más conducentes para contar con un marco de competencia leal y equitativa para todos los actores.
La decisión anunciada “no se encuadra en este marco y lejos de aportar soluciones para atacar el flagelo de la informalidad y sus nefastas consecuencias sobre el sector, tiene efectos negativos económicos, financieros y comerciales”, amplía.
En ese sentido el ABC asegura que “su impacto final es difícil precisar en este momento, pero que conociendo los resultados de experiencias pasadas son faltamente preocupantes”.
Las exportaciones son un recurso genuino que genera trabajo, inversiones y divisas, es preciso extremar los medios para evitar la presencia de operadores inescrupulosos, que provocan turbulencias con impacto en toda la cadena.
“Entendemos la gravedad de la situación y el desafío que ha significado la pandemia para nuestra economía, es por ello que proponemos que las autoridades nacionales realicen una convocatoria a todos los integrantes de la cadena para evaluar las medidas más adecuadas para el genuino ordenamiento del mercado”, precisa el Consorcio.
Las autoridades y todos los actores sectoriales deben sumar esfuerzos en pos del saneamiento de toda la operatoria de cadena de ganados y carnes bovinas.
En ese sentido propone dejar de lado “esta limitación, que trae alarma e incertidumbre a nuestros trabajadores, proveedores y clientes y que no contribuirá a resolver los problemas estructurales que padecemos”, detalla.
“El Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas insta a las autoridades y a todos los actores sectoriales a trabajar para sumar esfuerzos en pos del saneamiento de toda la operatoria de cadena de ganados y carnes bovinas”, concluye el ABC en el documento difundido el martes..
CICCRA
En tanto, desde la a Cámara de la Industria y Comercialización de Carne (CICCRA) expuso su oposición terminante “al cierre de exportaciones de carne vacuna resuelto por el gobierno en la tarde del lunes”.
La medida carga de responsabilidad por la inflación a un sector que no es formador de precios, ni responsable de la suba constante de los mismos, sino una víctima más, como el resto de los sectores económicos del país y, sobre todo, los consumidores, asegura la CICCRA.
Cabe destacar que la medida -en su primer día de implementación- no generó cambios en los precios de la hacienda de consumo comercializada en el Mercado de Liniers, que resultó sostenida comparada con los precios de la semana anterior.
Como contrapartida, la vaca de refugo, que el productor estaba vendiendo para limpiar su campo, con vistas a renovar su plantel para incrementar la producción, perdió precio significativamente.
En 2006 el cierre de exportaciones implicó la pérdida de 19.000 puestos de trabajo y la reducción del stock vacuno en 12.500.000 de cabezas.
De esta manera, el gobierno golpea al sector que tiene en sus manos la posibilidad de abastecer mejor -y a menor precio- el mercado interno y al mundo con carne de calidad.
Recordemos que en su versión anterior, el cierre de exportaciones implicó la pérdida de 19.000 puestos de trabajo y la reducción del stock vacuno en 12.500.000 de cabezas, es decir del 20% del stock nacional.
“Pese al alto costo social y económico, no sirvió para contener los precios, y solo sirvió para castigar al sector y reducir la productividad”, asegura CICCRA.
“Por todo esto, apoyamos el cese de comercialización de ganados y carnes hasta el viernes 28 de mayo”, concluyó la entidad (Noticias AgroPecuarias).