Insecticidas y fertilizantes para la tierra productiva
Hay varios factores que pueden incidir en el hecho de que la tierra vaya perdiendo las propiedades que necesita para seguir nutriendo a la planta de manera orgánica, y poder ser re utilizada en futuros cultivos.
BUENOS AIRES (NAP) Uno de los mayores intereses que poseen quienes eligen trabajar con el cultivo de plantas, sea en el espacio o ambiente que sea, es el de preservar la tierra cultivo tras cultivo. No hace falta pensar en grandes plantaciones incluso, esta iniciativa productiva, vale tanto para grandes extensiones de terreno, como para las plantas de maceta o canteros que pueden encontrarse en cualquier huerta urbana.
El trabajo adecuado y la correcta conservación de la tierra para ser reutilizada en futuros cultivos, es lo que motiva a muchos expertos a buscar continuamente la utilización de los productos adecuados para dicha tarea.
Es este, además, el motivo principal por el que aparecen plagas y las plantas sufren de ciertas carencias, básicamente porque la tierra se ve tremendamente expuesta a perder nutrientes y estructura durante el desarrollo natural de la planta.
Los insecticidas para plantas cumplen un rol fundamental en este circuito, sin embargo, es la tierra la que se ve directamente afectada en su calidad para poder servir de sustrato fértil para cultivos nuevos.
Costos
Debemos analizar en detalle el precio de insecticida para plantas, entre otros elementos necesarios para el cultivo, y la utilización de fertilizante líquido que es, principalmente, el que va a generar que la tierra sigue siendo alimento productivo para la planta, durante todo su desarrollo, aún y, sobre todo, en espacios reducidos como puede ser una pequeña maceta.
Es interesante de todas maneras, evaluar los costos generales que implican el cultivo y la correcta conservación de la tierra para evitar su degradación y volverse improductiva para el siguiente cultivo.
Cuidar la tierra
Si bien a simple vista pareciera que toda la atención se la lleva la planta y su cuidado, el consumo de fertilizante liquido es sin duda una necesidad de la tierra, la cual es fundamental alimentar para que siga ofreciendo las propiedades que el cultivo necesita durante todo su proceso.
El efecto del riego constante, entre otras variables, más allá de las lógicas relacionadas al crecimiento de la planta, generan muchas veces un exceso de sales que terminan por apelmazar o endurecer la tierra dejándola con ese aspecto compacto que nos da la pauta de que algo no esta bien.
Lo importante es dejar la tierra libre de microorganismos como virus o bacterias.
Hay varios factores que pueden incidir en el hecho de que la tierra vaya perdiendo las propiedades que necesita para seguir nutriendo a la planta de manera orgánica, y poder ser re utilizada en futuros cultivos.
Primero que nada, debemos tener en cuenta el color de la tierra, las plantas necesitan de la aparición de bacterias y hongos que se producen por la presencia de residuos orgánicos y estos se detectan fácilmente en tierras color oscuro o con tonos violáceos, por ejemplo. Esto habla de que estamos en presencia de un buen sustrato para nuestro cultivo, a diferencia de las tierras en tonos grises que nos indicaran ausencia de material orgánico y por consiguiente una tierra pobre.
Otro de los factores que puede afectar directamente la calidad del sustrato que usemos para nuestro cultivo, es el exceso de abono. Aunque no parezca, el uso excesivo de abonos genera más sales de lo que la tierra necesita, y en ese caso resulta tan perjudicial para la tierra, como si no hubiéramos usado abono alguno.
Cómo mejorar la calidad de la tierra
Si lo que buscamos es recuperar y revivir la tierra que ya pareciera no estar apta para volver a ser usada en un próximo cultivo, debemos empezar por drenarla, de esta manera estaremos limpiando la tierra del exceso de nutrientes, sales e insecticidas, a la vez que separamos meticulosamente los trozos de tierra más grandes que no permiten que las nuevas plantas crezcan orgánicamente.
Lo importante en este proceso es dejar la tierra libre de microorganismos como virus o bacterias, para luego revivirla agregando alguna materia orgánica que dependerá también de lo que se quiera cultivar.
Por último, y para dejar la tierra en perfectas condiciones para los nuevos cultivos, podremos también agregar los hongos y bacterias que, si son necesarios para el correcto desarrollo de la planta, y así dejar nuestra tierra en perfectas condiciones para el siguiente período de cultivo.
Recordando la importancia que tiene el cuidado efectivo y productivo de la tierra, no sólo cuidamos nuestro presupuesto, sino también el medio ambiente(Noticias AgroPecuarias).
