Se inauguró el Proyecto Estratégico de acompañamiento a pueblos indígenas y comunidades locales argentina, de la FAUBA

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Los TICCA representan un 22% de la superficie terrestre y coinciden con áreas que albergan el 80% de la biodiversidad.

Los TICCA representan un 22% de la superficie terrestre (Imagen: FAUBA)

BUENOS AIRES (NAP) En el marco del “Día Mundial del Ambiente”, se realizó la presentación virtual del programa que acompañará a 18 proyectos en territorios y áreas conservadas por pueblos indígenas y comunidades locales (TICCA) que abarcan a 32 comunidades de nuestro país, proyectos fueron seleccionados y financiados por el Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo Mundial para el Medio Ambiente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PPD/FMAM/PNUD).

Este evento, que se realizó el viernes último, abre una serie de encuentros virtuales que favorecerán el intercambio de saberes entre las comunidades e investigadores y profesionales de amplia trayectoria en temáticas socioambientales.

En tiempos de pandemia global, en donde urge repensarnos como humanidad, la ONU propuso como tema eje del Día Mundial del Ambiente a la Biodiversidad.

En este contexto, se llevó a cabo la presentación virtual del proyecto que acompañará a 18 proyectos en territorios y áreas conservadas por pueblos indígenas y comunidades locales (TICCA) que abarcan a 32 comunidades, de 8 pueblos indígenas, de 9 provincias. Estos proyectos fueron seleccionados y financiados por el Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo Mundial para el Medio Ambiente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PPD/FMAM/PNUD), coordinado a nivel nacional por Francisco López Sastre.

A nivel mundial, los TICCA representan un 22% de la superficie terrestre y coinciden con áreas que albergan el 80% de la biodiversidad. La noción de conservación suele remitir a una idea de naturaleza prístina y estática que debe ser protegida de la amenaza humana, reforzando la división entre sociedad/naturaleza que ignora procesos de co-construcción entre grupos humanos y su entorno.

En contraste, los TICCA traen nuevas luces sobre los procesos de cuidado y protección de la biodiversidad, poniendo el acento en el rol que tienen muchas comunidades como guardianas de la biodiversidad.

La Dra. Marcela Gally, Decana de la FAUBA, dio apertura al evento y enfatizó su preocupación por los pueblos indígenas que han sido sistemáticamente maltratados y despojados de derechos: “Es un orgullo estar presente en la apertura de este proyecto que consideramos estratégico no sólo para la Facultad y la Universidad sino para el país. Reivindicamos la cosmovisión de los pueblos indígenas con respecto a la naturaleza y la tierra, que han logrado a través de miles de años mantener esa biodiversidad en esas áreas que habitan”.

Mauricio Valdés, Representante Residente del PNUD-Argentina expresó: “Nos alegra que la Universidad de Buenos Aires sea parte del esfuerzo de construcción de esta gran red de soluciones innovadoras para cumplir con las metas de los objetivos de desarrollo sostenible. Esta es una pandemia que refleja la relación directa que hay entre la salud humana, la salud animal y la salud ambiental”.

A su vez, Silvia Vázquez, Directora de Asuntos Ambientales de Cancillería Argentina manifestó: “En este programa hay una valorización muy concreta de las culturas que forjan y han forjado nuestra identidad como pueblo argentino. Hay una enseñanza de muchísimo peso en la cultura de nuestros pueblos originarios y es concebirse territorio, persona y pueblo como una unidad, esa concepción de integralidad que a los blancos nos ha costado tanto llegar a comprender, a ponerle palabras, la cultura de nuestros pueblos originarios la tienen desde el principio, la dimensión de la espiritualidad de nuestros pueblos originarios está en la base de la apreciación del valor de la tierra”.

La Ing. Agr. Libertad Mascarini, Responsable Técnica del Proyecto, explicó los principales ejes que plantean los TICCA: “La recuperación de áreas degradadas por la deforestación, de especies amenazadas, de cultivos y de medicinas locales tradicionales, el fortalecimiento cultural, la gestión territorial, sistemas de producción sustentables, agroecológicos, fortaleciendo así territorios resilientes al cambio climático”.

La ingeniera MaScarini, expresó también que, de forma participativa junto a las comunidades, se irán construyendo indicadores ambientales, socioculturales, de equidad de género, de fortalecimiento de la autonomía y que “en diálogo de saberes entre los académico-científicos y los locales y ancestrales de las comunidades indígenas, avanzaremos en la co-construcción de nuevos conocimientos y soluciones que aporten a la soberanía alimentaria de los pueblos indígenas, a la mejora del ambiente y, por tanto, de la comunidad en su conjunto”.

Aseguró, asimismo, que los territorios conservados por pueblos indígenas se defienden de un modelo extractivista que arrasa con la biodiversidad y de un modelo sociocultural que impone el monocultivo de las mentes, donde germina el racismo que justifica la violencia contra los pueblos indígenas, como sucedió recientemente y sucede desde hace décadas.

Jorge Nawel, representante de Argentina del Consorcio ICCA y de la Confederación Mapuche de Neuquén, expresó que: “Los pueblos indígenas ya no somos más destinatarios de las políticas sino que queremos ser actores de la política, sujetos activos de las políticas públicas. Hay mucha tarea para hacer que generen actos de reparación concreta hacia las consecuencias que significó fundar un estado por encima de los territorios y las culturas de los pueblos indígenas”.

Por su parte, Florencia Gómez, Subsecretaria Interjurisdiccional e Interinstitucional del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, reflexionó sobre la importancia que tiene la iniciativa en el sentido que: “La conservación es con quien ya viene habitando el territorio de acuerdo a sus costumbres ancestrales y modos de vida. Es una oportunidad para pensar en los usos del suelo y de los bienes naturales. Debemos pensar en que los TICCA puedan llegar a ser una categoría de manejo que pueda ser reconocida legalmente. Los pueblos pueden conservar y mantener la gobernanza de sus territorios”.

Daniel Somma, Presidente del Directorio de Administración de Parque Nacionales: “En nuestro país hay 38 naciones que tienen su cosmovisión, su cultura, su idioma. Encontramos en los territorios situaciones muy conflictivas en cuanto al uso de los recursos, al aprovechamiento de los servicios ecosistémicos y en la planificación del Estado, encontramos situaciones discordantes que forman parte de un desafío a resolver pero que no se resuelven solamente con la tecnología, se resuelven con la construcción de acuerdos y ahí hay una cuestión de las identidades. Tenemos que hacer un esfuerzo de reconocimiento de estas naciones que, son las “Primeras Naciones”.

El Dr. Alberto Barbieri, Rector de la UBA, agradeció la invitación y manifestó disposición de toda la Universidad para que el proyecto siga creciendo: “Es un honor participar del inicio de este programa. Lo enmarcamos desde varios objetivos que tiene la Universidad, pero hay uno que es primordial en la Universidad Pública que es la extensión universitaria, llevar los saberes científicos-académicos a las realidades y necesidades de nuestros pueblos, aprender y retroalimentarnos. Desde la UBA defendemos los derechos de los pueblos indígenas y las nuevas generaciones tienen que aprender de esto. El Proyecto es una Red que hay que potenciar y que llega para quedarse”.

Sus expresiones permitieron visibilizar las problemáticas socioambientales que pesan sobre las comunidades: extractivismo minero, inundaciones, falta de acceso al agua, falta de recursos para gestionar sus territorios y protegerlos de impactos desregulados del turismo. En palabras de Francisca Olga Aparicio, la importancia de fortalecer y reconocer el lugar de las comunidades indígenas para la conservación de la diversidad biocultural permitirá transmitir a la sociedad y a los jóvenes que migran por falta de oportunidades que “el futuro está en el monte”.

La biodiversidad es necesaria para que el planeta cumpla sus ciclos orgánicos y las comunidades indígenas han demostrado ser sabias al vincularse de manera prudente y respetuosa con su medio de vida natural y espiritual.

Así, para cerrar el evento, Verónica Huilipan expresó que: “Los pueblos indígenas nos ponemos a la par del estado argentino para decidir de qué manera se ejercen nuestros derechos. Es un placer tener este tipo de conversación en este tiempo ya que marca el camino que deben atravesar las políticas públicas en la actualidad para pueblos indígenas, con participación indígena de manera permanente”.

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