En la campaña anterior el 85 por ciento de los fletes se hicieron por camión
El costo del transporte representa el 29% del precio del maíz y el 17% del valor de la soja. Evalúan asistir a pequeños productores de Cafayate afectados por el desborde de un río.
El 85% de los fletes para el transporte de granos con destino a los puertos sale por camión.
BUENOS AIRES (NAP) El transporte de granos de la campaña anterior por el Ferrocarril Belgrano, en el norte de Argentina, reemplazó el equivalente a 90 mil camiones, mientras el 85 por ciento de los fletes se realizó por este tipo de transporte terrestre para trasladar la cosecha a los puertos y tarifas que resultaron 30 por ciento más caro que el flete por ferrocarril.
Con precios planchados, insuficiencia de lluvias, bajos rindes y elevados fletes, el agro de la región está en llamas.
Precisamente los dirigentes de la Mesa de Enlace del NOA y NEA presentaron al ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Luis Basterra, el sombrío diagnóstico de la actividad y pese a tres horas de reunión los productores se retiraron con las manos vacías, indicó el diario El Tribuno de Salta.
La mesa regional, que quedó conformada en diciembre por asociaciones de productores rurales de Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero y Chaco, reclamó la eliminación o rebaja de las retenciones a un máximo del 5% para las legumbres y cereales del norte argentino.
Del total de la producción de granos generada en Salta
con destino a los puertos, el 85 por ciento va por camión y el 15 por ciento restante por tren
El agro de la región solicitó que el régimen diferencial se refleje de manera automática en los precios de pizarra y en la liquidación primaria de granos, para recuperar la viabilidad de las producciones y reducir los índices de pobreza, indigencia y desempleo en las provincias norteñas.
Las entidades rurales pidieron que las producciones de soja, maíz, trigo y girasol del NEA y NOA sean consideradas como economía regional, para alivianar las pesadas cargas fiscales.
Los productores salieron del encuentro frustrados, luego de que Basterra ratificara que la suba de las retenciones se aplicará sin diferenciar a la producción agrícola del norte frente a la de la zona pampeana. “Una vez más, la política se devora a la lógica. Nos condenaron a desaparecer. No vamos a rendirnos. Nuestra lucha sigue adelante”, manifestó la Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte en un duro comunicado.
A mediados de diciembre de 2019, el gobierno de Alberto Fernández dispuso un nuevo cuadro de Derechos de Exportación que ubicó a las alícuotas entre el 24,7 al 30% en la soja y del 6,7 al 12% en el trigo y el maíz. La ley de emergencia, que aprobó el Congreso en el cierre de 2019, dio luz verde a un esquema por el que los derechos de exportación podrían incrementarse hasta el 33% en la soja y el 15% en el maíz.
Las entidades rurales de la región insisten, con informes en la mano, que la actividad tiene rentabilidad negativa en el norte del país incluso para productores con campos propios.
Sostienen que el aumento de la presión fiscal tendrá serias consecuencias económicas y sociales en el NOA, donde cerca del 60% de la producción de granos se desarrolla bajo arrendamientos.
Con las cosas como están, de cada tres camiones que salen hoy con granos desde Salta, uno es para pagar las retenciones. Y con los otros dos, deben cubrirse costos producción, gastos de transporte y cargas impositivas cada vez más asfixiantes.
En este punto, el vicepresidente de la Asociación de Productores de Legumbres del NOA, José Iglesias, remarcó que entre el norte y el centro del país hay “diferencias abismales” en los costos de producción, los rendimientos de las cosechas y los fletes.
EN CAFAYATE
El secretario de Industria y Comercio del Ministerio de Producción y Desarrollo Sustentable, Nicolás Avellaneda, recibió al intendente de Cafayate, Fernando Almeda, para analizar la situación de los pequeños productores, artesanos y emprendedores de la zona, quienes resultaron afectados por el desborde del río Chuscha el 28 de diciembre del año pasado.
Avellaneda expresó que “se ha trabajado en la situación social y de contingencia de los pobladores que tuvieron problemas con la crecida y desborde del río, pero también es necesario que apuntalemos a las pequeñas economías regionales que se encuentran comprometidas por esta situación”. Agregó que “las economías familiares, artesanales y de muchos emprendedores de Cafayate deben resguardarse y para eso el Estado brindará la asistencia y herramientas suficientes para ayudar”(Noticias AgroPecuarias).
