En julio seguirá el alto nivel de liquidaciones de agroexportadores

Durante la primera semanas del mes, el campo aporta más de USD 1.500 millones y sostiene el equilibrio financiero, el flujo se frenaría hacia fin de mes.
(NAP) En las últimas cinco ruedas hábiles el campo liquidó más de 1.500 millones de dólares, el nivel más alto desde junio de 2023: este fuerte ingreso responde a la liquidación de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) acumuladas en el cierre de junio, cuando rigió una baja transitoria en las retenciones a la soja y el maíz.
Sólo entre el lunes y el miércoles de la semana pasada, las cerealeras ingresaron más 1.160 mill/dol (381 mill/dol el lunes, 269 mill/dol el martes y 517 mill/dol el miércoles).
En total, las DJVE de los últimos 5 días de junio alcanzaron un récord de 12,4 millones de toneladas, y se espera que generen ingresos superiores a los 4.000 mill/dol durante julio, ya que las empresas tienen 15 días hábiles para liquidar el 95% de esas operaciones.
Desde el mercado destacan que este “adelantamiento” de liquidaciones es positivo en el corto plazo, pero genera dudas sobre el comportamiento del flujo de divisas en la segunda mitad del mes.
“Lo que se ve es un ingreso fuerte en la primera quincena, pero después el panorama es más incierto”, explicaron a Ámbito.com desde Facimex Valores. La finalización del régimen de retenciones reducidas podría desacelerar el ritmo de ventas externas, en un contexto donde también caen estacionalmente las exportaciones del agro.
¿Qué pasará después?
La preocupación es que, con menos dólares del agro en el horizonte cercano, se incremente la presión sobre el tipo de cambio. De hecho, en los últimos días ya se observaron movimientos en el dólar financiero, que se ubicó por encima del centro de la banda cambiaria de $1.200, y aumentó la demanda de cobertura en divisas por gastos con tarjeta en el exterior, pagos de aguinaldos y cierre de posiciones en pesos.
La situación se complejiza aún más si se considera el déficit en la cuenta corriente, que en el primer trimestre del año alcanzó los 5.191 mill/dol. Economistas advierten que este desequilibrio externo, que refleja más salidas que ingresos de divisas por bienes, servicios y rentas, podría generar tensiones si no se financia adecuadamente. El superávit comercial se redujo, mientras que los egresos por turismo, fletes y servicios financieros se incrementaron notablemente.
Señales a seguir: dólar, consumo y cuentas externas
Si bien desde el Gobierno y el mercado consideran que la situación cambiaria aún está bajo control, los analistas recomiendan prestar atención a varios indicadores clave: la evolución del tipo de cambio real, la dinámica de las exportaciones del agro y la manera en que se financiará el rojo externo.
En ese marco, la performance del agro en las próximas semanas será crucial. El ingreso extraordinario de divisas de la primera parte de julio trajo alivio, pero si no se sostiene en el tiempo, el equilibrio podría volverse más frágil. (Noticias AgroPecuarias)