La Hidrovía vuelve a licitación: control internacional, menos tarifas y más transparencia
El Gobierno reactivó el proceso para concesionar el corredor fluvial Paraná-Paraguay. Con auditoría de la ONU, tope de peajes y exclusión de empresas estatales extranjeras.
(NAP) El Ejecutivo nacional de Argentina relanzó oficialmente la licitación de la Hidrovía, el sistema troncal de navegación del río Paraná que concentra el 80% de las exportaciones de granos, harinas y aceites de la Argentina.
Con un valor estratégico cercano a los 28.000 millones de dólares anuales, el nuevo proceso apunta a adjudicar la concesión antes de junio de 2026, bajo un esquema que busca corregir los errores del intento anterior.
El rediseño del proceso incorpora auditoría internacional a cargo de un organismo de la Organización de las Naciones Unidas, que fiscalizará cada instancia de la licitación: desde las mesas técnicas hasta la adjudicación final. Además, se publicará toda la documentación para garantizar el acceso a la información.
Las primeras mesas participativas ya se realizaron en Caba, Santa Fe y Rosario, y seguirán en Paraná y el nordeste argentino. En estos encuentros intervienen actores clave: provincias, cámaras empresarias, puertos, universidades y usuarios del sistema fluvial.
Entre las principales novedades del nuevo esquema se destacan dos puntos sensibles: el acortamiento del plazo de concesión de 30 a 20 años y la fijación de un tope tarifario. Las empresas no podrán cobrar peajes superiores a los actuales, y se espera que compitan ofreciendo menores costos.
También se excluye del proceso a compañías controladas por Estados extranjeros, una decisión que el Gobierno justifica como una forma de resguardar la soberanía sobre una infraestructura logística crítica. La operación quedará en manos privadas, pero con fiscalización activa tanto del Estado como de los usuarios.
El pliego técnico-legal se publicará entre octubre y noviembre de este año. Las empresas tendrán tres meses para presentar sus ofertas, y se espera que participen al menos cuatro o cinco grandes dragadoras internacionales, en asociación con firmas locales.
Antes, en julio y agosto, se desarrollarán las últimas rondas de mesas técnicas, y luego se convocará a una audiencia pública. (Noticias AgroPecuarias)
