Allflex: Caravana oficial de la Expo Angus de Otoño

Spread the love

Villanueva participó en la Expo Angus de Otoño con asesoramiento y demostraciones
en el uso de la caravana electrónica.

MV Santiago Russo (Izq) y Germán Pereyra (Der) de la firma cordobesa Villanueva, representantes de Allflex y distribuidora de las caravanas electrónicas.

(NAP) A partir de 2025 entraría en vigencia la obligatoriedad del uso de las caravanas electrónicas, una herramienta vital para optimizar los datos de trazabilidad en la actividad ganadera y en particular de los rodeos vacunos nacionales, una nueva demanda planteada por  los desafíos que imponen los mercados mundiales.

German Pereyra y Santiago Russo son los referentes de marketing y técnicos, respectivamente, de la firma Villanueva, representantes de Allfex en Villa María,  Córdoba, encargada de la comercialización de las caravanas electrónicas.

La firma, acompañó a los productores Angus en la 81ª edición de la Expo Angus de Otoño y continúa impulsando su porfolio de soluciones para la identificación electrónica de los animales.

La caravana electrónica es un sistema que ofrece grandes ventajas para toda la cadena: eficiencia, seguridad en los datos y trazabilidad con información certera de todo el ciclo de vida de cada animal y contribuye a tomar mejores decisiones para potenciar el negocio ganadero del productor.

El ecosistema funciona fundamentalmente con dos elementos: una caravana electrónica, un dispositivo pasivo (no emite señal propia) con un microchip en la parte interior y va sujeta a la oreja del animal y, por otro lado un lector, que emite una señal que recupera la información existente en el chip de la caravana.

“La caravana electrónica está vigente en el mercado hace 20 años, está posicionado y tiene su aceptación en un importante segmento de productores, aunque aún estamos a la espera de su implementación”, describe Germán Pereyra.

Con respecto a las ventajas que puede aportar el empleo de este sistema de identificación, el responsable técnico de la firma de Villa María, el médico veterinario Santiago Russo, explica que se trata de una herramienta vital.

“Nos da la posibilidad de tomar el dato rápido y de manera precisa, no hay ningún error en la lectura de la caravana. En cambio, cuando se trabaja con las de lectura visual, pueden aparecer errores en la interpretación del operario que toma el dato o, en la comunicación durante el trabajo en la manga”, explica Russo.

Con el empleo de la caravana electrónica “se evitan errores de comunicación, los datos se capturan muy rápido y de manera precisa. Para la captura de esos datos se necesita un bastón lector de la caravana y luego, si el productor quiere puede incorporar un software de gestión”.

Russo aclara que “no es necesario, porque el bastón generas un Excel cuando toma la lectura de la caravana y luego descarga la información en la computadora o, puede subirla a un software de gestión”.

Con respecto a la importancia del uso de la caravana electrónica, el técnico agrega que “radica en la trazabilidad individual, de modo que el consumidor sabe de donde proviene ese bife y, en el caso de un brote sanitario en el animal, se pude seguir la trazabilidad de ese producto, desde su origen”.

Las nuevas herramientas informáticas, permiten a través de un código QR acceder a toda la información de un animal determinado. Establecer el campo en el que fue criado, si tienen un certificado medioambiental o, si proviene de una zona no deforestada.

“La caravana es un dispositivo electrónico y con el bastón lector, puede conectarse a un celular o a una tablet, mediante bluetooch  con el geoposicionamiento, y sí el operario esta con el bastón lector junto al animal, se puede determinar donde se encuentra esa caravana, es muy importante para la trazabilidad”, amplía Russo.

Comercialización

Respecto de la cantidad total de animales caravaneados, se calcula en un millón de cabezas por mes y de ese total, Pereyra estima que “entre el 15% y el 20% de los animales, tienen incorporados el sistema de caravanas con identificación electrónica. Vemos que hay un creciente interés en el uso de esta tecnología”.

Con respecto al costo de cada caravana, de acuerdo con Pereyra, se calcula en el equivalente a un kilo de novillo en pie y para la adquisición del bastón, el costo oscila entre los U$S 1.800 y U$S 2.500,
“ más allá de la inversión, sabemos que tiene un rápido retorno, el desafío está en hacer un correcto uso del sistema. Para ello brindamos capacitaciones que permiten optimizar su uso y aprovechar todas sus ventajas. Trabajamos codo a codo con los veterinarios, los productores y sus equipos de trabajo”, cierra Pereyra(Noticias AgroPecuarias).

También le puede interesar...