Madereros denuncian una ‘grave crisis’ pero ven ‘solución’ si se construyen 2.000 viviendas de madera por mes

Enumeran problemas de sobrestocks, costos, dólar, exportación y piden financimiento para las mueblerías. También exigen que 10% de todas las construcciones tengan madera y afirman que la actividad es ‘carbono neutra’.

(NAP) El sector maderero de Argentina se encuentra “en una grave crisis que podría derivar en despidos si no hay soluciones en el corto plazo”, advirtió hoy la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines.

De iz a der: Vier, Fernando Couto (director ejecutivo de Faima), Omeñuka, Queiroz, Loutaiff y Milajer.

“Hay una fuerte caída de las exportaciones y la demanda interna no alcanza para resolver la sobreoferta de madera. En el NEA se producen 60 millones de pies cúbicos por mes pero se consumen solo 40 millones: hay un sobrante de 20 millones de pies cúbicos que no tienen destino”, dijo el presidente de Faima, Román Queiroz. En ese escenario, dijo que “los aserraderos medianos y chicos de Misiones, Corrientes y Entre Ríos están prácticamente parados”.

Queiroz propuso como “solución” que los estados encaren “la construcción de viviendas con madera: si el gobierno nacional, los provinciales o municipales toman la decision de construir 2.000 viviendas de madera por mes -que nos es mucho- el problema se resuelve prácticamente un 100 por ciento”.

“Hoy una vivienda social estándar requiere entre 7.000 y 8.000 pies cúbicos de madera. Es una decision politica”, insistió.

“Los costos de construcción son muy parecidos en todos los segmentos: una casa lleva entre 30 y 40 elementos de diferentes materiales y una casa con madera lleva lo mismo. Pero los tiempos de obras son infinitivamente menores: se hace en 3 meses no en un año y medio”.

Queiroz enumeró algunas medidas que están pidiendo al Gobierno, como “un dólar más competitivo” para exportar y el efectivo cumplimiento del compromiso al que en 2017 se llegó con la industria forestal argentina, por el cual el 10 por ciento de las viviendas sociales iban a realizarse en madera.

Faima es una entidad de 2º grado que representa al sector industrial maderero de toda la Argentina a través de sus 28 cámaras asociadas en las distintas provincias del país. La entidad realizó este jueves una conferencia de prensa en Buenos Aires.

Otras de las propuestas fue la de mejorar también la situación del sector del mueble -incluso de la mano de la propuesta anterior: “Viviendas nuevas requieren muebles”-. En este orden, Soledad Milajer, del Departamento Mueble de Faima dijo que “estamos reclamando construir de manera conjunta -con una fuerte decisión política- programas financieros que incentiven la demanda de muebles argentinos”, o elevando los límites de las tarjetas de crédito para este tipo de compras.

¿Una más? “Por otro lado -indicó Queiroz- tenemos el problema de las importaciones” por la puesta en marcha del Sistema de Importaciones de la República Argentina que dificulta las compras de insumos para la producción y el ingreso de maquinaria. “En los últimos meses -el Sira- ha mejorado un poco”, reconoció sin embargo.

Costos

La cadena foresto industrial emplea a alrededor de 70.000 personas que serian 120.000 sumando los trabajos indirectos, aporta el 1,7 del PBI y en el rubro exportación en 2021 alcanzaron a 440 millones de dólares. “Pero en los últimos meses el sector está en una importante recesión y a las industrias les cuesta trasladar los costos al precio del producto final”, dijo Mercedes Omeñuka, de la Asociación de Madereros y Afines de Corrientes (Amac).

La dirigente empresarial le puso números al problema de algunos costos argentinos. “Chile tiene un flete interno de 8 dólares por metro cúbico y el costo de los puertos es de 9 dol/m3. En Brasil, el costo del flete interno es de 20 dol/m3 y los gastos portuarios, 15 dol/m3; en Uruguay, fletes 20 y gastos portuarios 12 dol/m3. En Argentina, el costo del flete es de 30 dólares por m3 y de 40 dol/m3 el gasto portuario”.

Daniel Vier, de la Cámara Argentina de Aserraderos de Madera pidió al Estado “encarar una soluciona habilticional sostenible y sustentable” a partir de la construcción con madera. Explicó que la situación “depende de cuestiones políticas y de falta de un marco legal”

Si bien resaltó que existen leyes de fomento a la construcción con madera a nivel ancional, “el sistema de administraciones de Argentina genera muchos incovenientes a nivel provincial y municipal”, especialmente apuntó contra los Concejos Deliberantes municipales que no aprueban los proyectos. “Tenemos mas consultas sobre obras pero los municipios les niegan la posibilidad”, acusó

“Con ese excendente de 20 millones de pies, se pueden tranquilamente contruir 2.000 casas por mes, que divididas por provincias no son mas de 100 casas. Y tenemos la experiencia y el know how. Solo hace falta un poco de difusión para que la gente  se anime a tomar este material, que es muy noble, para la construcción de sus casas.

Ambiente

Por otra parte, Vier aseguró que “la huella de carbono del sector es cero”. Esto es -explicó- porque “el arbol saca el cabono del ambiente y lo fija en forma de madera. Quiere decir que en la construcción con madera generamos una suerte de retiro de carbono del ambiente, al que confinamos en una estructura  que puede durar muchos años. No hay otro material de estas características”, aseguró.

Además pidió que los municipios acompañen, que el sistema financiero otorgue créditos a las casas hechas con madera y que las compañías de seguro tengan líneas especiales.

Finalmente, desde Faima pidieron que se cumpla con el financiamiento de la ley de Bosques Nativos (26.331) para proteger 55 millones de hectáreas de monte. En este orden, Daniel Loutaiff, “no se cumple con la forma en que se financia la ley”, que depende del Ministerio de Ambiente y de las autoridades de aplicación, que son las provincias. (Noticias AgroPecuarias)