Una finca de Mendoza ya incorporó un sistema de riego con cerebro
El equipo tiene comunicación y una base “en la nube” o, en criollo simplificado, “en internet”. “El aparato recibe información del campo a través de sensores de humedad y una estación meteorológica.
MENDOZA (NAP) El manejo del agua en el desierto es todo un desafío en Mendoza, por lo que la tecnificación del riego resulta clave si se suma a la ecuación el “tarifazo” eléctrico que hace que el productor tema en cada encendida de bomba.
Si bien gran parte del campo mendocino aún se riega a manto pese a la crisis hídrica que parece haber llegado para quedarse de manera definitiva, se multiplican también los casos de sistemas más eficientes tanto en rendimiento como en costos.
Desde hace algún tiempo están disponibles en el mercado sistemas que permiten la apertura y cierre del riego de manera remota, lo cual facilita la tarea en la finca. En este marco de innovación, una finca de Mendoza es pionera en el país en la instalación del “primer controlador de riego con cerebro”.
Se trata del equipo NetBeat, creado por la multinacional de soluciones agrícolas israelí Netafim. La primera unidad en Argentina comenzará a funcionar en julio en la finca “Santa Mónica” del gigante agroindustrial “Aceitera General Deheza” (AGD) en la localidad lavallina de Jocolí.
Las 700 hectáreas de almendros serán controladas a través de esta novedosa tecnología.
Riego inteligente conectado a la nube
“La gran diferencia es que hoy no hay controladores en el mercado que permitan manejar información de caudal de más de una fuente; este, en cambio, es multicaudalímetro, por lo que solo hace falta uno por finca”, explica representante de Netafim en Cuyo, Facundo Sícoli. en declaraciones al sitio MDZ
El equipo tiene comunicación y una base “en la nube” o, en criollo simplificado, “en internet”. “El aparato recibe información del campo a través de sensores de humedad y una estación meteorológica; a esto se suma la información que se pueda aportar desde el campo al sistema, con lo cual se genera un informe para que el técnico a cargo del riego determine cuánto y cuándo regar de acuerdo a la necesidad del cultivo”, detalla.
De esta forma se puede acceder a la información sobre riego, activarlo o regularlo desde cualquier periférico como pueden ser un teléfono móvil, una tablet o una computadora.
En el caso de la finca piloto de Lavalle el NetBeat manejará de forma centralizada un total de 9 equipos de riego que hoy funcionan en el predio.
El poder regular cuánto y cuándo liberar el agua ayuda a ahorrar costos de energía en la activación de la bomba de riego, mientras que el control remoto y en tiempo real permite optimizar la distribución de la mano de obra en otras tareas.
Como (casi) todo en la innovación tecnológica, este sistema de riego “con cerebro” no es para cualquiera, aunque tampoco se trata de algo prohibitivo.
Partiendo de la base que se puede aplicar a cualquier tipo de cultivo, en el caso de la vitivinicultura, por ejemplo, la inversión se justifica a partir de las 20 ó 25 hectáreas, señala Sícoli.
“Para un productor que ya cuenta con un equipo de riego no es una inversión mayor”, asegura.
Por lo pronto el debut del NetBeat será con almendras en Jocolí. El segundo equipo tiene como potencial destino de instalación campos azucareros de Ledesma en el NOA (Noticias AgroPecuarias).
EB
