Chaco: de la sequía a la inundación en pocas horas

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Las intensas lluvias benefician a la ganadería pero condicionan el remanente de girasol. En varias ciudades hubo anegamientos.  Antes, la situación era “desesperante”. 

SÁENZ PEÑA, Chaco (NAP, por Hipólito Ruiz*). Mientras las intensas lluvias generaron serias complicaciones en los cascos urbanos de Sáenz Peña, Avia Terai, Napenay y Quitilipi, en el campo chaqueño las intensas lluvias que cayeron el fin de semana trajeron alivio para la ganadería aunque condiciona seriamente a los pocos lotes de girasol que no fueron cosechados aún.

En una recorrida hecha por el equipo periodístico del diario Norte por los departamentos Independencia, Comandante Fernández y O’Higgins, se pudo constatar el estado de los cultivos de la época, a la par que la mayoría de los productores aprovecharán la humedad para la siembra de maíz y de lo que resta de soja.

Los productores consultados señalan que este fenómeno que se dio en el Chaco merece estar alertas, por todo lo que implica el cambio climático.

De una situación de estrés hídrico a raíz de la falta de lluvias en una importante franja del centro chaqueño, en tan solo horas esta zona pasó a estar inundada.

Ante la consulta, los productores consideran que el clima, la naturaleza, tiene su fuerte incidencia en lo que está ocurriendo en el centro chaqueño, contra lo cual el hombre poco puede hacer, salvo construir obras de desagües y realizar los correspondientes mantenimientos.

Al respecto, Oscar Muchutti, presidente de la Sociedad Rural Centrochaqueña, con sede en Machagai, opinó en cuanto a la inundación de Sáenz Peña. “No creo que haya manera de escurrir 200 o 300 mm de una planta urbana en forma rápida, al no existir un declive pronunciado, por más desagües que haya”, dijo, y mencionó que “en nuestra zona, Machagai, que es prácticamente ganadera, es buenísima el agua caída hasta ahora, los esteros necesitan más milímetros. Hacia la zona sur han caído más de 100 milímetros”.

Miguel Rodríguez, de Avia Terai, opinó que “esto es el Chaco, pasamos de una situación casi desesperante por la falta de agua a estar inundados, especialmente en los poblados. Para el campo excelente, salvo para aquellos que nos quedó girasol por cosechar”.

Agregó que para “la soja y maíz, muy bueno y que la lluvia es inmejorable para la ganadería”.

Ernesto Ivan, de La Tigra, opinó que “esto es así, cuantas veces pasamos de una sequía devastadora a estar inundados. Lamento lo de Sáenz Peña y esa amplia zona agrícola afectada. Productores de esa zona estaban sembrando o pensaban sembrar y con esto se les terminó el ciclo agrícola”.

“El exceso nunca es bueno. Toda esa zona pertenece a productores de menor escala y son los que contribuyen para mejorar el desarrollo local”, finalizó. (Noticias AgroPecuarias)

*Periodista. Publicado en el diario Norte.

Foto de César Mendoza.

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