Con reservas el campo ratificó en las elecciones su apoyo a la actual política económica

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El aumento del combustible restará competitividad al negocio agrícola. Persisten los problemas de inundaciones en varias zonas del país

BUENOS AIRES (NAP) Las elecciones de este domingo pasado ratificaron el camino que quiere imprimir a su gestión el presidente Mauricio Macri, con un fuerte apoyo del electorado que reside en el principal centro productivo del país, la zona núcleo.
En ese sentido la consultora Zorraquin + Meneses y Asociados publicó este lunes su habitual informe, en el que consigna que los resultados de las elecciones confirmará la línea económica y social que viene desplegando el gobierno.
Algunos aspectos a los que apuntará el gobierno central es promover inversiones. Reformar en el costo laboral y en el revalúo de activos, además de una reforma ¬social, cuyos alcances aún no se conocen, además de impulsar el comercio exterior. Una asignatura pendiente para la gestión Macri es achicar el défi¬cit ¬fiscal, quizás con menos gradualismo, que el que se venía observando.
Una de las primeras medidas implementadas por la administración central fue autorizar una suba en el precio de los combustibles, una muestra de que la economía seguirá ajustando variables, lo que obliga a las empresas a recalcular sus costos de logística, confirma el informe de Zorraquín – Meneses y Asociados, publicado por Agritotal.
Con respecto al clima destacan que empieza a bajar el agua aunque las napas siguen altas; en muchas zonas la estrategia de siembras dependerá de las lluvias de noviembre. Y, como paradoja, en algunas zonas falta humedad superficial para asegurar buena calidad de las sementeras. Se escucha que muchos ya tienen decidido que la gruesa este año se siembra “tarde” para disminuir riesgos.
PRECIOS
Con los márgenes de la gruesa se está empezando a dar un cambio de tendencia. En estos últimos meses los resultados económicos esperados para la campaña 2017/2018 eran mejores para maíz que para soja (con precios de soja futuro entre 245 y 250 u$s/tn y de maíz de 150 u$s/tn).
Pero el precio de la soja comenzó a subir y los productores ya hacen las cuentas con precios entre 260 y 270 u$s/tn, también subieron algo los fertilizantes y entonces la cuenta se dio vuelta, sobre todo en las zonas más alejadas de los puertos.
Si bien ya hay muchos insumos comprados, se observa un “recalculando” en la asignación de superfi¬cies. A futuro: cómo mantener una importante superficie de maíz a medida que desaparezcan las retenciones a la soja? Se preguntan los consultores.
Por otro lado con el Biodiesel, la mala noticia de los altos aranceles impuestos por EEUU para el producto argentino (57%…y pueden subir más) se vio compensada parcialmente por la re-apertura del mercado europeo.
Para el 2017 se estima exportar a Europa unas 370.000 toneladas (hasta el 2012, cuando se cerró el mercado, se exportaba más de 1,5 millones de toneladas). Sigue el rumor de un aumento de retenciones al biodiesel en nuestro país para destrabar el conflicto con Estados Unidos.
Además la ley de semillas no tiene avances, otro año que se pierde para regularizar este tema y ya queda claro que cada vez que parece que va a haber acuerdo, alguien patea el tablero. Si no hay acuerdo de productores e industria semillera, se corre el riesgo que sea un funcionario o el congreso los que diseñen la normativa, lo que resolvería lo legal pero no resolvería la informalidad.
Mientras tanto, el Informe del USDA del 12 de octubre publicó el balance mensual de oferta y demanda, con una tendencia alcista, con pocos cambios en las estimaciones de producción y con algunas variaciones en los stocks ¬finales, lo que generó movimiento en el mercado.
El “status” del mercado sigue siendo el mismo, un mercado con una producción alta, sostenido por la demanda, lo que nos debería incentivar a la toma de coberturas, agrega la consultora.
Hoy, el negocio ganadero tiene a las exportaciones que siguen en aumento (ya habrían superado las 300.000 toneladas para el 2017), el consumo interno sigue fi¬rme (57-58 kg/habitante/año) y los precios al mostrador no suben más que la inflación. El precio del novillo gordo de calidad se ubica entre los 35 y 38 $/kilo y la vaca gorda entre 25 y 27 $/kilo.
Precios razonables, con un ternero en los 40 $/kilo (con un mercado de venta futura en el orden de los 42 $/kilo). La rentabilidad de los feed lots se ha deteriorado un poco. En este contexto, la Mesa de las Carnes pediría al gobierno un estímulo ¬escalonado para los que produzcan novillos de más de 400 kilos. Quizás se logre este bene¬cio, pero la competitividad de largo plazo no viene por este lado sino por bajar la presión fi¬scal en general y seguir abriendo mercados.
Por último, el negocio Lechero con precios que siguen en los 5,60 a 5,80 $/litro, con máximos en algunos tambos de más de 6 $/litro según calidad, sanidad y volumen. El gobernador de Santa Fe reclamó una ayuda especial para los tamberos. Siguen las negociaciones para la venta y/o restructuración de Sancor(Noticias AgroPecuarias).
EB

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