La producción primaria cayó 9,7%

Fue en el primer trimestre del año. Sin embargo, la caída fue compensada con el aumento de la producción de manufacturas de origen agropecuario.

BUENOS AIRES (NAP). La actividad primaria de la Argentina mostró una caída del 9,7 por ciento en el primer trimestre de 2016 comparado con igual período del año anterior, debido a la merma de la producción agrícola y ganadera, de acuerdo al Informe Macroeconómico de abril del Consorcio Regional de Experimentación Agrícola (Crea).

En el primer caso, la baja está asociada a la menor producción estimada de trigo (-12,3%) y proyectada en maíz (-3,8%), y girasol (-10,9%) para la presente campaña en relación a la campaña 14/15 y tiene que ver principalmente con la menor superficie sembrada producto de la incertidumbre imperante en el proceso político local en los momentos de definición del plan de siembra.

Paralelamente, se observa una merma en el nivel de actividad del sector ganadero durante el primer trimestre del año, situación que se evidencia a partir del deterioro de las compras por parte de la industria frente a una creciente escasez de oferta.

De acuerdo a datos del Mercado de Liniers, que concentra cerca del 17% del total comercializado a nivel país, el ingreso de cabezas de ganado cayó un 16,2% en esta primera etapa del año (295.200 cabezas contra 352.320 en 2015).

La eliminación de los permisos de exportación (ROEs) y la mejora de los precios impactaron de manera positiva en las expectativas del negocio. Como resultado, la producción industrial de carne se contrajo un 4% en relación al primer trimestre de 2015 lo que se explica por una baja de 13,2% en la faena de hembras y del 4,5% en la faena de animales pequeños. Este resultado estaría relacionado con el aumento esperado en el peso medio de faena, producto de la modificación en la relación ternero-novillo, y una mayor de retención de vientres

Industria

La industria manufacturera, responsable de aproximadamente el 20% del valor agregado generado en la economía y el 70% de las exportaciones, observa una situación de estancamiento en la primera etapa del año.

Este resultado está asociado a las fuertes caídas registradas en la producción de manufacturas de origen industrial (MOI), pero fueron parcialmente compensadas por el buen desempeño de las de origen agropecuario (MOA).

En este sentido, el excelente desempeño de la agroindustria está relacionado con la liberalización parcial del mercado cambiario, la eliminación de retenciones a las exportaciones de trigo, maíz y girasol, y la supresión de los permisos de exportación (ROEs), medidas que han provocado un importante reacomodamiento de los precios relativos en el sector.

Según datos de la Dirección de Mercados Agrícolas del Ministerio de Agroindustria, durante la campaña 15/16 las compras de soja para procesamiento acumuladas al 30 de marzo registran un incremento del 32,7% con respecto al acumulado a la misma fecha en la campaña 14/15.

En contraste, se observa una importante baja en la demanda de trigo (-38,8%), maíz (-43%) y girasol (-8,6%) para industrialización a raíz de la mejora en las condiciones de exportación. Como resultado, la demanda agregada de granos por parte de la industria procesadora reflejó un incremento del 8,3% en relación a la campaña anterior, 80% del cual se concentró durante el primer trimestre de 2016.

Los datos coinciden con el sistema de información de la Administración Federal de Ingresos Públicos, que da cuenta de un incremento del 30,8% interanual en las toneladas exportadas de productos agroindustriales acumuladas a marzo de esta campaña (se considera ago-15 a mar-16), de las cuales un 75% se concentró en los primeros tres meses de este año.

 En consonancia con las declaraciones de compra, el incremento en las exportaciones industriales se debió mayoritariamente a los envíos de productos elaborados de soja. (Noticias AgroPecuarias)

EB