Trabajadores de Senasa inician este lunes huelga de 12 días

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Si no hay arreglo salarial, será hasta el 31 de julio. No habrá controles fitosanitarios, ni se certificarán exportaciones de granos y frutas y no habrá traslado de hacienda.

BUENOS AIRES (NAP). Los trabajadores del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) realizarán desde este lunes 20 de julio un paro de actividades de 12 días (hasta el 31 de julio incluido) en reclamo de un acuerdo salarial, y adelantaron que la medida de fuerza “se va a hacer sentir” en el circuito agroindustrial, ya que haría peligrar el abastecimiento de carne.

Este miércoles, los trabajadores del Senasa culminaron una medida de fuerza de 10 días en la cual se vio afectado el comercio de granos y fundamentalmente el trabajo con los frigoríficos: nueve plantas dedicadas a la exportación debieron suspender su actividad, licenciando a 7.000 obreros porque -argumentaron- no pudieron recibir animales.

La Asociación de Trabajadores del Estado -sindicato al que pertenece el Senasa- reclama la “apertura de la paritaria sectorial, equiparación de salarios con organismos que cumplen funciones similares, pago de adicionales adeudados, pase a planta permanente de los contratados y aplicación de la banda horaria de barreras sanitarias”, entre otros puntos.

La protesta incluirá, este lunes desde las 10, una movilización en la autopista Ricchieri, en Buenos Aires, con corte y acampe a la altura de los peajes del aeropuerto internacional de Ezeiza.

La profundización de las medidas de fuerza se resolvió en asambleas en las distintas oficinas que el Senasa tiene en el país, luego de que fracasaran las negociaciones en el Ministerio de Trabajo para que se reconocieran una serie de demandas en cuanto a adicionales, equiparación de salarios con otros organismos estatales.

El paro de 10 días complicó el desarrollo de las distintas actividades agroindustriales, que controla el Senasa. Se afectaron los controles fitosanitarios en plantas, rutas, pasos fronterizos y aeropuertos. Se dificultaron los embarques para la exportación de cereales y oleaginosas y los despachos de frutas, lácteos y otros productos alimentarios.

También se impidió el traslado de hacienda vacuna desde los campos a los mercados concentradores y desde estos a las plantas de faena. (Noticias AgroPecuarias)

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