La era de la energía eléctrica de maíz

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La fabricante de etanol Bio4 creó Bioeléctrica, una empresa que genera energía con el cereal. Genera un megavatio por hora con 500 ha de maíz. 

 

RIO CUARTO, Córdoba (NAP). En esta ciudad, se fundó la primera industria argentina Río Cuarto. En unos 15 días arranca Bioeléctrica, la primera planta de Argentina capaz de generar energía eléctrica a partir del maíz. Se llama Bioléctrica y fue creada en el seno de Bio 4, una cooperativa creada por productores del sur cordobés para fabricar etanol, el combustible en base al cereal.

En este caso, para la producción de bioelectricidad son más de 47 emprendedores los que se unieron, entre productores agropecuarios, profesionales y hasta pequeños electricistas de Río Cuarto. También forma parte de la sociedad Generadora Córdoba, del Sindicato de Luz y Fuerza.

El presidente de Bioléctrica, Germán Di Bella, contó al diasrio La Voz del Interior que la iniciativa surgió hace tres años y se pondrá en marcha en dos semanas. En tanto, ya sueñan con que se replique en toda la provincia.

La nueva industria podrá generar un megavatio de energía por hora con 52 toneladas de maíz picado por día, esto es lo que se suele cosechar en 500 hectáreas (en Córdoba se siembran un millón y medio de esta gramínea anual).

Con un megavatio se puede alimentar la demanda de 800 viviendas. En principio, Bioeléctrica aportará uno de los tres megas de energía diario que consume Bio 4, pero la idea es vender la energía al sistema interconectado nacional.

“Nuestra preocupación era aumentar la siembra de maíz, aumentar la demanda y agregar valor”, dice Di Bella. Alude a frenar la sojización, que ha alterado la recomendada intercalación de maíz y soja en favor de la última, lo que contribuye a degradar los suelos.

Construcción

“Esta es una planta escuela; por ser la primera hubo errores que elevaron al costo a 4,5 millones de dólares, pero el estimado es de tres millones. En Alemania hay siete mil plantas así. En Córdoba, con seis, generaríamos el 10 por ciento de lo que se consume en la provincia y el productor podría pasar a tener otro rol, a producir servicio”.

Di Bella explicó que para convertirse en electrón, el choclo debe llegar a la planta con un 30 % de humedad. Cada dos horas, un silo de más de 20 metros de alto mezcla unos seis mil litros de estiércol de los tambos de la zona, que aportan bacterias, con unas 4,2 toneladas del maíz triturado. Con esta mixtura a una temperatura constante de 51 grados se genera el metano, que alimenta el motor alemán generador de energía

“Antes los productores no nos uníamos ni para comprar una fumigadora. Pero la experiencia de Bio 4 fue muy positiva; al asociarse uno se anima a tomar más deuda, riesgo. Si realmente queremos integrarnos verticalmente, tenemos que pensar en unirnos”.

La planta es de tecnología alemana (de la firma Caterpillar) y demandó una inversión de 4,5 millones de pesos de parte de los 47 productores, profesionales y empresas socios de la firma. (Noticias AgroPecuarias)

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